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Washington refuerza la seguridad cosmética con la prohibición del formaldehído
- Daniel Jiménez
- 17 oct
- 2 Min. de lectura
El Estado de Washington ha aprobado una nueva regulación que prohíbe el uso de formaldehído y sustancias que lo liberen en productos cosméticos, consolidando su compromiso con la protección de la salud pública y alineándose con las políticas ya adoptadas en la Unión Europea y otros mercados internacionales.
Esta medida supone un cambio relevante para las marcas que operan en Estados Unidos, que deberán adaptar sus formulaciones y estrategias de cumplimiento.
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Regulación cosmética: Formaldehido
El formaldehído ha sido empleado históricamente como conservante y agente antimicrobiano en diversas categorías de productos —entre ellas, tratamientos capilares, endurecedores de uñas y ciertos cosméticos faciales—. Sin embargo, su potencial para causar irritación, sensibilización cutánea y efectos adversos respiratorios, además de su clasificación como posible carcinógeno humano, ha motivado su progresiva retirada del mercado en distintas jurisdicciones.
La nueva normativa no solo veta el uso directo de formaldehído, sino también el de aquellas sustancias capaces de liberarlo en condiciones normales de uso. En total, el texto regulatorio identifica 25 compuestos liberadores de formaldehído que quedarán restringidos cuando sean añadidos intencionadamente a productos cosméticos.
Para las empresas con presencia o distribución en el estado, esta decisión implica revisar en detalle las formulaciones, las fichas de ingredientes y la documentación de proveedores, asegurando la ausencia deliberada de formaldehído y de sus liberadores. También se recomienda reforzar la trazabilidad en la cadena de suministro y mantener actualizada toda la evidencia técnica que pueda ser solicitada en caso de inspección.
Desde el punto de vista del cumplimiento regulatorio, esta medida pone de relieve la necesidad de una gestión preventiva del riesgo químico y de una mayor transparencia en la composición de los productos cosméticos.
Aplicación progresiva de la medida
La norma fue aprobada a finales de agosto de 2025 y entrará en vigor a finales de septiembre. Las restricciones obligatorias comenzarán a aplicarse a partir de enero de 2027, otorgando un periodo de transición suficiente para la reformulación de productos. Los minoristas del estado podrán seguir comercializando existencias previas hasta finales de ese mismo año.
Con esta iniciativa, Washington se sitúa entre los estados pioneros de EE. UU. en adoptar criterios de seguridad cosmética más estrictos, reflejando una tendencia global hacia productos más seguros, transparentes y coherentes con los estándares internacionales.
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